Nuestros biotipos no solo determinan las formas de nuestro cuerpo, también influye en nuestros objetivos y en como deberemos entrenar para conseguirlos.
Ya sabrás que no todas las personas tenemos las mismas características y por tanto, las respuestas y adaptaciones al entrenamiento son muy diferentes en cada situación.
Lo que debes saber sobre los biotipos
Hay personas que siempre están delgadas y les cuesta mucho aumentar su masa muscular, mientras otras, al contrario tienden a ganar peso rápidamente y deben cuidar mucho su alimentación para estar en forma. Entre estos dos extremos se mueve un amplio margen de situaciones que en gran medida vienen determinadas por el biotipo. A continuación os diré que significa este término y como lo podemos manejar según sea tu situación para que puedas orientar tu entrenamiento y alimentación.
Sobre el año 1954, los estudios del médico William Sheldon , basados en la observación de 46.000 personas, concluyeron básicos en los cuales se descubren tres dimensiones de variación, coincidiendo con el mayor desarrollo alcanzando por cada una de las tres capas embrionarias durante la gestación, llamando a los tres tipos Endomorfo, mesomorfo y ectomorfo.
Estos tres biotipos en la edad mayor se identifican teniendo en cuenta tres puntos clave: la estructura, la complexión muscular y la acumulación de grasa. Es importante señalar que tenemos algo en cada característica desarrollada por Sheldon. Casi ninguna persona o atleta es totalmente ectomorofo, endomorfo o mesomorfo, sino que tenemos hacia un biotipo y otro con multitud de variables interpersonales.
LOS TRES DIFERENTES BIOTIPOS
EL ECTOMORFO:
Este es un tipo de cuerpo común que se caracteriza por un volumen delgado con relativamente poco músculo y grasa también. Las personas con este tipo de cuerpo les cuesta obtener peso, músculo o grasa. También, para la mayoría de los casos este tipo de cuerpo no es capaz de tomar una gran cantidad de estrés deportivo (es decir, cuando se entrena con entrenamiento con pesas pesado, cardio, etc.).
La única ventaja real para este tipo de cuerpo es la ganancia mínima de grasa no va a experimentar al intentar ganar músculo, porque para la mayoría de los casos este tipo de cuerpo tiene un alto metabolismo .
EL ENDOMORFO:
Esto es lo contrario al ectomorfo, ya que es un tipo de masa corporal que es más grande y redondeada. Por lo general, los niveles de grasa son altos, pero estas personas son portadores de un poco más de músculo que los ectomorfos.
El endomorfo por lo general tiene problemas para bajar de peso, sobre todo de grasa. Sin embargo, tienen algo más fácil ganar músculo en poco tiempo, así como la grasa, lo cual en este último caso un inconveniente. La mayoría de la gente en este tipo tienen un metabolismo lento, de ahí su alto porcentaje de grasa corporal.
EL MESOMORFO:
Esto es de lo mejor de ambos mundos. Estas personas son atléticas y se caracterizan por una estructura muscular con cantidades relativamente bajas de grasa corporal. No tienen mucha dificultad para perder grasa y, al mismo tiempo pueden ganar músculo con facilidad.
También como el ectomorfo tienen un metabolismo más alto que mantiene sus niveles de grasa bajo control.
En los siguientes artículos os contare específicamente cada uno de ellos, así como debes entrenar y lo que tienes que hacer.
Escrito por: Edu Medina