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Dietas cetogénicas y rendimiento deportivo

Dietas cetogénicas y rendimiento

Con los años las dietas low-carb y las dietas cetogénicas se han vuelto muy populares a causa de los resultados que han conseguido en personas obesas y en deportistas cuyo objetivo principal eran la definición muscular y la pérdida general de grasa.

Hasta ahora se ha visto que este tipo de dietas suelen funcionar muy bien para lograr pérdida de peso. Además se ha visto que pueden funcionar para tratar ciertas patologías.

De todos modos existen estudios contradictorios en lo que se refiere a los resultados en el crecimiento muscular, la fuerza y el rendimiento deportivo.

Dietas low-carb

Son dietas bajas en carbohidratos en las que la energía que nos proporcionan los hidratos de carbono a lo largo del día es menor al 30% del total. Es decir, si consumimos 2.000 calorías al día, una dieta low-carb nos aportaría como máximo 600 calorías en forma de carbohidratos, que pasadas a gramos nos darían 150 gramos de hidratos.

Dietas cetogénicas

Estas dietas suelen ser más restrictivas que las low-carb en cuanto al consumo de carbohidratos.

Este consumo bajo de hidratos de carbono tiene como objetivo llevarnos al estado de cetosis, en el cual nuestro cuerpo aumenta la cantidad de grasa que utiliza como combustible metabólico.

Aunque hay distintos tipos, una dieta cetogénica suele dividir los macronutrientes en un 75% de grasa, un 20% de proteínas y sólo un 5% de hidratos de carbono.

alimentos de dietas cetogénicas

 

Usos terapéuticos

Las dietas cetogénicas tienen algunos usos terapéuticos al utilizarse en ocasiones para tratar la diabetes y varios problemas relacionados con patologías cardíacas, respiratorias y neurológicas.

Pero a pesar de los beneficios que estas dietas aportan a la salud, existe cierta controversia sobre cómo pueden afectar al rendimiento deportivo. Sabemos que con los carbohidratos que ingerimos fabricamos glucógeno, uno de los principales combustibles que los músculos utilizan en el ejercicio.

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Este glucógeno suele consumirse cuando la intensidad de nuestra actividad es moderada o alta. A intensidades más bajas el combustible metabólico principal son las grasas.

Lo sorprendente de algunos estudios fue que los atletas de resistencia que seguían una dieta cetogénica también fueron capaces de quemar grasa a altas intensidades. Esto, sin embargo, no ocurrió en los atletas que siguieron una dieta alta en carbohidratos.

Las dietas cetogénicas hipocalóricas provocan una pérdida mayor de peso que las dietas altas en carbohidratos. Esto es así porque el glucógeno que fabricamos con los hidratos de carbono retiene agua y por ello las dietas cetogénicas evitan la acumulación de agua.

Hay que tener muy presente que una pérdida de peso no implica una pérdida de grasa.

Perdida de peso en dietas cetogénicas

 

Resultados antagónicos

Por el momento no existen pruebas que demuestren que las dietas cetogénicas sean mejores para los deportes de alta intensidad o fuerza, ya que hay resultados tanto a favor como en contra. Esto se debe a que los hidratos de carbono ayudan a nuestros músculos a recuperarse, son buena fuente de energía para ellos, nos ayudan a producir hormonas implicadas en nuestro metabolismo y evitan que las proteínas que forman nuestros músculos se degraden.

De todos modos esto no implica que nuestra alimentación deba ser alta en carbohidratos. Esto dependerá de cada persona. Una dieta moderada en carbohidratos o ciclados de carbohidratos suele funcionar bien en muchos deportes.

Resistencia y dietas cetogénicas

 

Conclusión

En general, las dietas cetogénicas pueden servir para tratar ciertas enfermedades, aunque la ciencia no ha probado todavía que sean la mejor elección para deportes explosivos como el powerlifting. Sin embargo, sí que son buena opción para deportes de resistencia.

Además, la rápida pérdida de peso que conlleva a través de la pérdida de agua, puede mejorar la adherencia de los pacientes a la dieta.