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Lesiones de hombro: sobreviviendo al supraespinoso

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LESIONES DE HOMBRO

LAS TEMIDAS LESIONES DE HOMBRO: ANÁLISIS Y SOLUCIONES DE LOS PROBLEMAS MÁS FRECUENTES.

LESIONES DE HOMBROS

ANALIZANDO LA ARTIULACIÓN DEL HOMBRO Y SU FUNCIONAMIENTO

En este artículo, analizaré e intentaré explicar el funcionamiento de la articulación del hombro y cuáles son las lesiones más frecuentes que suelen producirse, sus causas y las soluciones más recomendables en cada caso si llegamos a la tan temida lesión.

Como principio, comenzaré diciendo que la articulación del hombro es, quizás, de las más complejas de analizar del cuerpo humano, tanto por su composición como por su funcionamiento. En cuanto a su composición, el hombro está formado por huesos (clavícula, húmero, omóplato, acromion), músculos (músculo supraespinoso, bíceps, tríceps, deltoides, musculatura subescapular…) y ligamentos y tendones (ligamentos acromioclaviculares, tendón supraespinoso, tendón de las cabezas larga y corta del bíceps braquial…). Como se ve, pese a hablar de una articulación, se encuentra formada por un número importante de elementos.

Si nos referimos al funcionamiento del hombro, debemos señalar que prácticamente en cualquier movimiento que realicemos con nuestro torso superior, se va a ver implicada de alguna forma esta articulación: movimientos de empuje/tracción, subir un objeto pesado a una estantería, comprimir un paquete de leche antes de tirarlo… Y debido al incontable número de movimientos que realizamos a diario en nuestra vida (más la carga que le podamos sumar de trabajo en un gimnasio) que es una articulación altamente sensible y proclive a las lesiones. De hecho, si hiciéramos una encuesta entre gente que vaya al gimnasio o haya ido en algún momento de su vida, seguramente nos saldría un alto porcentaje de personas que o bien han tenido molestias de algún tipo o bien han terminado lesionándose en alguno de los elementos que conforman la articulación del hombro. Por ello, vamos a tratar de explicar los errores más comunes en los entrenamientos, así como las lesiones y sus tratamientos más frecuentes (además, os contaré mi caso personal, pues yo mismo sufrí una doble rotura parcial en el tendón del supraespinoso y de la cabeza larga del bíceps, y os puedo asegurar que eso te mantiene una laaaaarga temporada sin pisar el gimnasio).

De hecho, incluso Arnold Schwarzenegger tuvo problemas con sus hombros (aunque evidentemente hablamos de alguien que trabajaba con un elevadísimo nivel de cargas). –> Los problemas de hombro de Arnold Schwarzenegger – ¿Cómo evitar cometer los mismos errores?

EL MANGUITO ROTADOR

Si bien como hemos explicado antes, el hombro tiene numerosos componentes que lo conforman, en este artículo nos centraremos principalmente en el MANGUITO ROTADOR, que por su composición y funcionalidad centra un alto porcentaje del número de lesiones relacionadas con esta articulación.

En primer lugar, el manguito rotador del hombro está formado por los siguientes músculos principalmente: SupraespinosoInfraespinosoRedondo menor Musculatura Subescapular. De todos ellos, quizás el más nombrado sea el Supraespinosco, no tanto en relación al músculo sino en relación al tendón.

En cuanto a la tipología de lesiones con las que nos podemos encontrar, principalmente existen dos: tendinitis y desgarros o roturas (en mi caso todo comenzó con una tendinitis con calificaciones en el tendón supraespinoso de mi hombro derecho y desembocó en una doble rotura parcial del tendón del supraespinoso y la cabeza larga del bíceps).

LA TENDINITIS DEL MANGUITO ROTADOR

La tendinitis del manguito de los rotadores se produce debido a la irritación de estos tendones e inflamación de la bursa que recubre dichos tendones. A este tipo de lesión también se le conoce con el nombre de Síndrome de pinzamiento, y puede tener su origen en muy diversas causas: el mantenimiento de una misma posición (fija y repetitiva) durante largos periodos de tiempo (como por ejemplo personas que trabajan diariamente 7-8 horas en una oficina con ordenadores), la práctica de actividades deportivas que requieren de movimientos repetitivos (tenis, béisbol, natación…), dormir todas las noches sobre el mismo brazo (se produce un movimiento anti natural de rotación y abducción de la articulación), trabajar con los brazos por encima de la cabeza durante muchas horas (pintores, albañiles…), una mala postura mantenida durante años…

El desgarro, por contra, puede producirse o bien de forma súbita (provocado por un esfuerzo altamente intenso que nos provoque el desgarro directamente) o bien ser consecuencia de una lesión progresiva que se va agravando con el tiempo y de la que no nos llegamos a recuperar totalmente. En este último, el tratamiento quirúrgico es inevitable para lograr una plena recuperación. Por supuesto, los desgarros pueden ser parciales o completos.

DIAGNÓSTICO DE UNA LESIÓN EN EL MANGUITO ROTADOR

En el caso de la tendinitis, los síntomas más característicos serán molestias al realizar movimientos por encima de la cabeza y al intentar elevar de forma lateral el brazo, y se centrarán principalmente en la zona frontal del hombro, pudiendo irradiarse hacia el lateral del mismo. Si las molestias se dilatan en el tiempo y no le ponemos remedio, éstas pueden llegar a presentarse incluso en un estado de reposo o incluso notar cierta rigidez en la articulación. Si nos referimos a un desgarro (ya sea parcial o total) nos encontraremos un dolor más bien intenso, pudiendo tener dificultades para movilizar la articulación e incluso debilidad en el miembro afectado. También se pueden presentar «chasquidos» al mover la articulación. En los desgarros, si no acudimos a un especialista en busca de tratamiento, podemos provocar que los síntomas empeoren y sea imposible aliviarlos incluso con medicamentos.

TRATAMIENTO DE LAS LESIONES DEL MANGUITO ROTADOR

En mi caso, al inicio de las molestias el tratamiento fue conservador (fisioterapia, oestepatia, láser, ultrasonidos y antiinflamatorios), pero la cercanía de unas oposiciones (y también por qué no decirlo, mi empeño en acudir a ellas aún a sabiendas de que podía empeorar la lesión), provocaron que no consiguiera una correcta recuperación, por lo que el final era inevitable… Nada más pasar las pruebas físicas, acudí a mi traumatólogo, y con una radiografía y un artrografía (se inyecta un material de contraste en la articulación del hombreara posteriormente usar ya sea una radiografía, una tomografía computarizada o una resonancia magnética para tomarle una imagen), se confirmaron las sospechas. La solución estaba clara: había que pasar por el quirófano. Resultado: cirugía y varios meses de una rehabilitación lenta y, todo hay que decirlo, dolorosa.

En el caso de que la lesión no sea tan grave como la mía, y se quede simplemente en una tendinitis en el manguito rotador (en cualquiera de sus componentes), el tratamiento es mucho más sencillo:

– Aplicar hielo varias veces al día (10-15 minutos por vez) sobre la zona afectada.

– Antiinflamatorios orales para ayudar a bajar la inflamación de la zona.

– Restringir toda actividad física que implique movimientos que se traduzcan en nuevas molestias y que puedan agravar la lesión (cosa que evidentemente yo no hice 🙁 ).

– Con el fin de fortalecer la articulación y su musculatura y mejorar la movilidad, nos pueden prescribir sesiones de fisioterapia o, como fue mi caso, incluso de osteopatía.

– Si la tendinitis fuera más grave de lo normal o las molestias fueran excesivamente limitantes en la vida normal de la persona, se podría llegar a realizar una cirugía mediante artroscopia con el fin de eliminar el tejido inflado y parte del hueso situado encima del manguito retador (acromion) con el fin de reducir la presión y el posible roce de los tendones con este hueso (esto último también me lo realizaron a mi cuando pasé por quirófano).

Y SI ME OPERAN, ¿CUÁNTO TIEMPO TARDARÉ EN RECUPERARME?

En caso de llegar a necesitar cirugía para reparar la lesión, el tiempo de recuperación depende de cada persona, si bien lo normal es que el tiempo total pueda estar entre 3 y 6 meses (dependiendo del tipo de operación y de lo rápido que avance la persona en la rehabilitación).

Más adelante, hablaremos de los ejercicios que más contribuyen dentro del gimnasio a que la gente se lesiones los hombros, los errores más comunes que se cometen en otro tipo de ejercicios pero que también influyen en la articulación del hombro, etc…

Escrito por: Miguel Gómez