Además de las necesidades diarias, la nutrición es un factor importante cuando hacemos ejercicio. Es la forma en que tu cuerpo obtiene lo que necesitas para mantenerte y prosperar saludablemente.
El ejercicio y la nutrición siempre van de la mano cuando alguien habla sobre salud y el estado físico, porque ambos son importantes para mantener una salud óptima.
El ejercicio utiliza muchos de los recursos de tu cuerpo y esos deben ser repuestos. La nutrición y el ejercicio no solo se complementan sino que se necesitan mutuamente.
Incluso si tienes una dieta perfectamente equilibrada, necesitas hacer ejercicio para quemar las calorías. También necesitas hacer ejercicio para fortalecer tus músculos.
Te invitamos a disfrutar este interesante artículo; y a continuación, darle un vistazo a nuestro patrocinador Betway Perú, la casa de juegos y apuestas deportivas más confiable y entretenida que puedes encontrar online.
Primera comida – Empezar bien
Tu primera comida del día es importante. Comer un desayuno saludable es especialmente importante en los días en que el ejercicio está en tu agenda.
Elegir el tipo correcto de desayuno es crucial. Un desayuno rico en fibra y proteínas puede combatir el hambre por más tiempo y proporcionar la energía que necesitas para mantener tu ejercicio.
En lugar de comer cereales cargados de azúcar hechos de granos refinados, prueba la harina de avena, el salvado de avena u otros cereales integrales con alto contenido de fibra. Luego, agrega algunas proteínas, como leche, yogur o nueces picadas.
Si prefieres tostar, elije pan integral. Luego combínalo con un huevo, mantequilla de maní u otra fuente de proteína.
Contar con los carbohidratos adecuados
Gracias a las dietas de moda bajas en carbohidratos, los carbohidratos han recibido una mala reputación. Pero los carbohidratos son la principal fuente de energía de tu cuerpo.
Elegir el tipo correcto de carbohidratos es importante. Demasiadas personas confían en los carbohidratos simples que se encuentran en los dulces y los alimentos procesados.
Lo ideal es comer los carbohidratos complejos que se encuentran en los granos enteros, frutas, verduras y frijoles.
Los integrales tienen más poder de permanencia que los granos refinados porque los digieres más lentamente.
Ayudan a sentirte lleno por más tiempo y alimentado a lo largo del día. También pueden ayudar a estabilizar tus niveles de azúcar en la sangre.
Los granos de calidad tienen las vitaminas y minerales necesarios para mantener tu cuerpo funcionando de la mejor manera.
Aumenta tu ingesta de frutas y verduras
Frutas y vegetales son fuentes ricas en fibra natural, vitaminas, minerales y otros compuestos que su cuerpo necesita para funcionar correctamente. También son
bajos en calorías y grasa.
Trata de llenar la mitad de tu plato con frutas y verduras en cada comida. Trata de “comer el arco iris” eligiendo frutas y verduras de diferentes colores.
Esto te ayudará a disfrutar de la gama completa de vitaminas, minerales y antioxidantes que ofrecen estos productos.
Opta por grasas saludables
Las grasas no saturadas pueden ayudar a reducir la inflamación y ayudan a proporcionar calorías. Si bien la grasa es un combustible primario para el ejercicio aeróbico, tenemos mucho almacenado en el cuerpo para alimentar incluso los entrenamientos más largos.
Sin embargo, obtener grasas insaturadas saludables ayuda a proporcionar ácidos grasos esenciales y calorías para mantenerle en movimiento.
Las opciones saludables incluyen: Nueces, semillas, aguacates, aceite de oliva.
No reduzcas demasiadas calorías
Si estás tratando de perder peso o tonificar tu cuerpo, puedes verte tentado a reducir una tonelada de calorías de tus comidas.
Reducir las calorías es una parte clave de la pérdida de peso, pero es posible ir demasiado lejos. Las dietas para bajar de peso nunca deben dejarlo sintiéndose agotado o enfermo.
Relacionado: Usa nuestras calculadoras de ingesta de calorías para determinar tus necesidades calóricas diarias según tu altura, peso, edad y nivel de actividad
Esas son señales de que no estás obteniendo las calorías que necesitas para una buena salud y buen estado físico.
Una dieta que contiene entre 1,200 y 1,500 calorías diarias es adecuada para la mayoría de las mujeres que intentan perder peso de manera segura.
Una dieta con 1,500 a 1,800 calorías diarias es apropiada para la mayoría de los hombres que intentan perder el exceso de peso. Si estás muy activo o no quieres bajar de peso mientras estás en forma, es posible que deba comer más calorías.
Habla con tu médico o con un nutricionista para saber cuántas calorías necesitas para respaldar tus objetivos de estilo de vida y acondicionamiento físico.
El equilibrio es la clave
A medida que te establezcas en un estilo de vida activo, probablemente descubrirás qué alimentos te proporcionan la mayor cantidad de energía y cuáles tienen efectos negativos.
La clave es aprender a escuchar tu cuerpo y equilibrar lo que se fundamente bien con lo que es bueno para ti.
Trata de hacer del desayuno una parte de tu rutina. Opta por carbohidratos complejos, fuentes de proteínas magras, grasas saludables y una amplia variedad de frutas y verduras.
Llena tu nevera y bolsa de deporte con bocadillos saludables para hacer ejercicio.
El balance correcto de carbohidratos, proteínas y otros nutrientes puede ayudar a alimentar tu rutina de ejercicios.
Relacionado: Restricción calórica: La fuente de juventud para músculos envejecidos
Comprender cómo se procesan los alimentos en tu cuerpo y cuáles son tus necesidades es muy útil para mantener un estilo de vida nutricional equilibrado.