Investigadores finlandeses de la Universidad de Turku han revelado que la liberación de endorfinas inducida por el ejercicio en el cerebro depende de la intensidad del ejercicio.
La liberación de endorfinas inducida por el ejercicio puede ser un mecanismo importante que afecta la motivación del ejercicio y el mantenimiento de la actividad física regular.
Un estudio reciente realizado en el Centro PET de Turku, Universidad de Turku, muestra que el popular entrenamiento de intervalo de alta intensidad (HIIT) conduce a la liberación de endorfinas en el cerebro, lo que podría aliviar el estrés físico y emocional causado por el ejercicio de alta intensidad. Un ejercicio aeróbico de menos de una hora, menos exigente, no causa la liberación similar de endorfinas.
En el estudio, el HIIT aumentó significativamente la liberación de endorfinas y otros péptidos opioides en las áreas del cerebro que controlan el dolor y las emociones. Además, el HIIT indujo sentimientos negativos en los sujetos de prueba, que se asoció con una liberación más alta de endorfinas. Aunque el ejercicio aeróbico de una hora no indujo una liberación significativa de endorfinas, aumentó los sentimientos placenteros y la euforia, que se correlacionó con la liberación de endorfinas.
– Nuestros resultados ponen de relieve que la intensidad del ejercicio afecta a la liberación de endorfinas y que el sistema de opioides cerebrales está involucrado tanto en sentimientos positivos como negativos causados por el ejercicio físico realizado en diferentes intensidades, dice la candidata doctoral Tiina Saanijoki de Turku PET Center.
– La liberación de endorfinas inducida por el ejercicio puede ser un mecanismo importante que apoya la motivación del ejercicio y el mantenimiento del ejercicio regular. En intensidades de entrenamiento moderadas, las sensaciones placenteras causadas por la posible liberación de endorfinas pueden promover el ejercicio habitual. A intensidades de ejercicio muy altas, la liberación de endorfinas parece estar relacionada con sentimientos negativos y dolor aumentados, y puede ser necesario para manejar el reto emocional y físicamente exigente. Sin embargo, estos sentimientos negativos pueden desalentar el ejercicio. La intensidad del ejercicio debe tenerse en cuenta al iniciar nuevas rutinas de ejercicios, explica Saanijoki.
El estudio se realizó mediante tomografía de emisión de positrones (TEP). A los participantes se les inyectó un compuesto radioactivo que se une a los receptores opioides de su cerebro. La radioactividad en el cerebro se midió con el escáner TEP en tres condiciones: después de una sesión de ejercicio de intensidad moderada aeróbica de 60 minutos, después de una sesión de entrenamiento de intervalo de alta intensidad (HIIT) y después del descanso.
La investigación fue financiada por la Academia de Finlandia, el Distrito de Hospitales del suroeste de Finlandia, la Universidad de Turku, el Ministerio de Educación del Estado de Finlandia, la Fundación Paavo Nurmi, la Fundación Novo Nordisk, la Fundación Paulo , La Fundación Cultural Finlandesa, la Fundación Instrumentarium Science y la Fundación Juho Vainio.
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